Las vitaminas son muy importantes para nuestro equilibrio, para saber si tenemos carencia, lo mejor es pedirle a tu médico que te tome exámenes para saber si tienes carencia o no, de todas formas para sospechar si existe carencia de algún vitamina hay algunos factores que nos pueden dar una idea ¡acá te contamos!
Vitamina A: su carencia daña la vista, falta protección en la piel. Dos alimentos ricos en vitamina A son las zanahorias y las espinacas.
Grupo B: la carencia del grupo B implica fatiga crónica, nerviosismo, irritabilidad, insomnio, despigmentación de la piel, bajo rendimiento deportivo, entre otros. Dos alimentos ricos en vitamina B es la carne idealmente orgánica y los cereales integrales.
Vitamina C: su carencia puede producir diferentes alergias, las mucosas sangran o se hinchan, mala cicatrización, infecciones crónicas. Dos alimentos ricos en vitamina C son las cerezas y los arándanos.
Vitamina D: su carencia puede producir caries dentales, uñas que se rompen fácil, dificultad para sanar una fractura. Dos alimentos ricos en vitamina D es la sardina y los huevos.
Vitamina E: su carencia puede hacer que te dificulte respirar en las montañas, trastornos cardiovasculares, baja de libido. Dos alimentos ricos en vitamina E es el huevo y los cereales integrales.
Vitamina F: su carencia puede producir caspa en grandes cantidades, ezcema, irritación o sequedad de la piel, acné. Dos alimentos ricos en vitamina F
es el aceite de oliva extra virgen y aceite de sésamo.
¿Y los prebióticos para que sirven?
En el multivitamínico está presente la inulina un prebiótico natural. Los prebióticos facilitan la digestión de la lactosa y protegen contra la diarrea, el colon irritable y la inflamación intestinal. También previenen infecciones urogenitales y promueven la barrera de defensa del intestino, favoreciendo el crecimiento de las bifidobacterias y de los lactobacilos.
¿Qué minerales tiene?
Magnesio: ayuda a luchar contra el estrés, el insomnio, interfiere en la regulación del metabolismo y es tónico muscular.
Calcio: juega un papel importante en la construcción de huesos y dientes.
Hierro: tiene un papel esencial en la oxigenación celular, participa en el proceso respiratorio del todo el organismo.
Zinc: regulador del sistema hormornal, nervioso, anti-infeccioso, cicatrizante.
Manganeso: ayuda a regular el sistema nervioso y el azúcar en sangre.
Cobre: estimula las defensas inmunitarias, favorece la absorción de hierro.